- Publicado el
El artículo discute el High Performance Computing (HPC), destacando su evolución desde los primeros clusters en los años 50 y 60 hasta tecnologías avanzadas como Lustre. Esta última mejora la eficiencia en la gestión de almacenamiento mediante una arquitectura que separa funciones entre nodos, facilitando la escalabilidad y reducción de costos. El texto enfatiza la importancia del HPC en tareas computacionales intensivas y celebra los principios de programación de "divide y vencerás" y "desacoplamiento".